¡Un batido, de letras, grande, porfavor.....................!.
¡Un batido, de letras, grande, por favor……………!
Han pasado ya varios días y una debería estar bastante más centrada o ubicada, que digamos… pero os tengo que confesar que desde la primera vez que entré en esta extraña cafetería mis pensamientos se someten a una especie de carrusel, que además, en cada instante, percibe tanto los sonidos como los símbolos sin poder mantener ninguna secuencia lógica. Y ya que todo parecía difícil por si solo, porque se refería a un vaso lleno de las dificultades, en este preciso momento lo es más……. Bien, os cuento, el sitio se llama “letroxia”, tiene mucho que ver con la lectura y por consiguiente con la escritura, o era a revés…. De forma más explicita, se refiere directamente al lenguaje. Era un día por la tarde, el tiempo cada vez invitaba más a disfrutar de este tan particular olor a viento primaveral, y el calor que hace que te sientas cómodo debajo de este increíble mantel de color azul-celestial. Yendo hacia un lugar totalmente distinto, tropecé, ya sabéis, casualidades de esta vida, y entré…..El sitio aparentemente no tenía nada que llamara mí entonces desaparecida atención, pero me equivoqué…..y no os podéis imaginar como… Aquí es donde me acuerdo de la famosa frase: “¿Por donde quiere su majestad que comience?- Comienza por el comienzo-le dijo el Rey con toda gravedad-; continúa con la continuación, y finaliza en el final.” Lewis Carroll (Alicia en el País de las Maravillas)Allá voy…………………………………………………………………………………………….Desde hace mucho tiempo buscaba una cafetería diferente, con este ambiente peculiar, donde puedes leer tranquilamente un libro o escribir notas en tu cuaderno, y donde lo exterior no va en desacuerdo con tu difícilmente conseguida paz interior. Donde el café invoca estas exóticas imágenes de memorias de África…. No obstante, según pasaban los años, dejé las ilusiones aparte y me tomo cualquier tipo de bebida caliente parecida al café o al té, de pie o sentada, de prisa, como la gran mayoría, y ya está. Pero todo cambió aquel día, entré en “letroxia” y me senté, y ahí fue cuando me quedé muda…… aquello no tenía nada que ver con lo que solemos estar acostumbrados.Ahora que recuerdo, el sitio no tenía ningunos carteles colgados por las paredes, ni tampoco nada de avisos, nada de anuncios, nada de ofertas, etc. Las paredes estaban pintadas de colores, claros y alegres, había muchos cuadros… podéis ver los que queráis, o mejor todavía, según las teorías de las asociaciones, podéis ir discriminando los que no os gusten y visualizar los que más os apetezca en este preciso momento.Las mesas eran redondas, de madera oscura, con unas sillas de un respaldo enorme y aparentemente cómodo.La verdad es que cuando intento acordarme del ruido que hacía en aquel lugar, aquel día, solo puedo aseguraros que no era molesto, ni desagradable. Toda mi percepción se fue hacia una dirección distinta por lo cual no presté mucha atención sobre el sonido, pero no me parece que haya sido algún tipo de música con letras que significaran algo para mí. Puede que simplemente era música, música en su estado puro, con pensamientos encerrados en cada uno de los presentes. Pero hay más, la sala acababa en un pasillo largo y estrecho, al final del cual se veían estos colores llamativos y vivos, parecía un jardín. Dudé por un momento, fuera o dentro. Supongo que os pasa en muchas ocasiones, que después de hacer una rápida visualización, revisión inconsciente por todo el lugar, hay algo que os hace elegir un sitio en concreto. O en otras ocasiones no puede ser, porque el sitio que os gustaría poder elegir está ocupado. Tome una decisión femenina ¿fuera o dentro, dentro o fuera, que es lo que quiero….? Después de una larga lucha interna opté por este desconocido jardín. Escogí una de las primeras mesas que vi libres, elección masculina, y me senté, había ciertos factores espacio temporales que podían influir durante toda mi estancia en “Letroxia”. De momento el ritmo de los acontecimientos era tan rápido que no pude realizar ningún análisis ni síntesis de los factores que podían tener alguna relación con lo que iba a pasar posteriormente. ¿Qué suele ocurrir una vez que por fin has encontrado este estado de un relax artificial que te permite estirar las piernas y apoyar los brazos? De forma más o menos explícita empiezas a identificar las nociones espaciales, empiezas a reconocer las figuras fondo y desde luego no puedes evitar utilizar tu capacidad de simbolización……coges la carta, te centras en el vocabulario y con una articulación correcta pides lo que más te apetezca. Siguiendo una secuencia parecida llegué a observar mí alrededor, la gente mostraba una curiosidad e interés exagerado a la hora que les traían los pedidos. Es entonces cuando se volcaban totalmente, como si el mundo dejara de existir, en los vasos, grandes, pequeños, medianos, de todos tipos de colores, tazas de porcelana, tazas de cristal, como si de un mercadillo de antigüedades se tratará. Los que han estado allí hablaban poco, más bien intercambiaban las opiniones o las impresiones, por lo menos eso era lo que parecía. ¿Cuantos errores habré cometido hasta el momento de estirar la mano para alcanzar la carta? ¿Cuantos graves y cuantos leves, o puede que hasta hora he tenido suerte y los métodos que he utilizado me han permitido desarrollar bien los consiguientes caminos? ………..La abrí…. Sentí entre un escalofrió y miedo, entendí que mi nivel perceptivo, como conceptual, desapareció del pensamiento como si nada…..todo se trasformó y de repente era blanco….. Os podéis imaginar con que rapidez intenté utilizar a todas las conexiones posibles para salir de esta…..Conversión fonema-grafema, déficit, distinción, reglas, dis…. y más.El camarero repetía una y otra vez: ¿que quieres?, ¿hay algo que te gusta especialmente, quieres que te ayude elegir? Un auténtico apuro, unas verdaderas dificultades….. ¿Te traigo la carta con imágenes?, tendrás que rellenar las letras que faltan y el pedido es tuyo.......Si había, tal como os lo estoy contando, dos cartas, una estaba compuesta por letras, estas se trasformaban en sílabas y creaban unas palabras…. Si eras capaz podías pedir el batido de f-r-e-s-a, en secuencia fre-sa, y con más suerte fresa, pero si no, fresa la dividían en fre-sa, y como es seguido en f-r-e-s-a. De un modo u otro tenias una escasa posibilidad de beber lo que has pedido. Las tazas, los vasos, estaban llenas de letras, sílabas y palabras. Pero lo importante era que existía la compensación. Nadie parecía sentirse dis……..Os dejo, para que, con plena tranquilidad y libertad, dis-frutéis de un batido de fresa, reflexionando sobre los distintos procesos que nos hacen dis- tinguir entre los sabores de fresa y de chocolate…..Un niño, a mi lado, pidió un batido de c-h-o-c-o-l-a-t-e, lo removía con una cuchara grande y parecía ser feliz.
Muchos saludos chic@s, y es un auténtico placer poder escribir y sentir está conexion letraria con vosotros de nuevo.
3 comentarios
Loli -
Gracias por compartir con nosotros esos escritos, pero no estaría de más que intentases publicarlos.
Un abrazo
Loli
Benja -
Qué relato más fantástico y que manera más divertida de sintetizar todo lo que hemos estado aprendiendo y trabjando en clase.
Sinceramente, enhorabuena.
Un besazo y el placer de leerte ha sido mío.
Benja
P.D.: ¿Nunca has pensado en estudiar filosofía o convertirte en escritora profesional??
Alejandro -
Qué bien poder volver leerte de nuevo. Ya está arreglado lo del enlace desde la plataforma.
Ahora me voy, a Letroxia, o sigo allí todavía...
Un saludo
Alejandro